A lo largo de la vida el cuerpo cambia, y también las zonas íntimas. Cambios debido a embarazos, partos, cambios hormonales, menopausia y el propio envejecimiento natural. Todo ello hace que haya cambios internos y externos en el área vaginal que afectan su aspecto, irrigación y lubricación generando trastornos como:

1. Pérdida de tono en la zona vaginal, con mayor amplitud, incluso prolapsos, generando incontinencia urinaria.
2. Atrofia y resequedad vaginal, produciendo molestias y disconfort durante las relaciones sexuales, lo que termina en un ciclo de frustración.
3. Labios menores grandes que incomodan al llevar ropa ajustada o al realizar algún deporte.

¿Para qué personas está indicado el tratamiento de HIFU vaginal?

A partir de los 30 años se producen importantes cambios en los tejidos de los órganos reproductores, que se acentúan a partir de los 50 años. El embarazo y el parto pueden provocar una relajación excesiva de la vagina, lo que da lugar a una pérdida de elasticidad, que se ve agravada por la pérdida de hormonas de la menopausia.

La consulta puede ser causada por el síndrome de relajación vaginal excesiva, la incontinencia, así como la sequedad y atrofia vulvovaginal, que causan muchos problemas en la vida sexual de la mujer.

1. Problemas de vaginitis

Suelen buscar tratamiento las mujeres de 30 a 60 años, pero también las más jóvenes, de 17 a 18 años, que tienen crecimiento exagerado de labios menores o una vaginitis que les impide mantener relaciones sexuales por primera vez.  También es eficaz para corregir la atrofia vaginal y reducir la incidencia de las infecciones del tracto urinario.

2. Mujeres maduras con o sin menopausia

Las mujeres de entre 50 a 70 años que siguen siendo sexualmente activas pueden necesitar un tratamiento de reconstrucción genital por atrofia vulvar severa. Auqnue, el  HIFU íntimo  está indicado para todas las edades.

3. Personas con incontinencia urinaria

Una vez, que la mujer ha evidenciado estas molestias y siente que su vida cotidiana está afectada, se decide y busca ayuda; pero que es lo más importante dentro este proceso, es seleccionar un especialista en el área de Gineco-estética acreditado y con vasta experiencia para dar solución y permitir mejorar la calidad de vida de la paciente.

¿Qué opciones de tratamiento existen?

Es de vital importancia la evaluación inicial en la que el especialista analizará el historial médico de la paciente, los síntomas que tiene, cualquier patología que sufra y medicaciones que tome. A continuación, examinará físicamente a la paciente y le propondrá las posibles soluciones a su problema. En nuestro instituto Gynestetiq ofrecemos diversos procedimientos comprobados y efectivos:

NO QUIRÚRGICOS

• Con tecnologías de regeneración de tejidos mediante ultrasonido focalizado de alta intensidad (HIFU)que aplica energía en la capa de la fascia y mucosa que forman el suelo pélvico, mediante el calor se consigue la formación de colágeno y elastina que ayuda a tensar la zona mejora y regenera los pilares de sustentación a nivel de la uretra para tratar la incontinencia urinaria. Adicionalmente tensa y engrosa la vagina, reduce su diámetro interno y externo, mejora la lubricación vaginal y aumenta la satisfacción sexual
• Con tecnología de estimulación muscular del suelo pélvico mediante ondas electromagnéticas de alta intensidad (HIFEM), aprobada FDA 1998 para tratamiento IUE / IIU / IUMixta, esta tecnología activa estructuras nerviosas profundas sin dolor e incomodidad (activación raíces sacras), adicionalmente  genera  contracciones supramáximas con  una tensión mayor durante varios segundos, que permiten fortalecer e hipertrofiar la musculatura del periné mejorando la estática del piso pélvico y reduciendo problemas de incontinencia urinaria, recuperando así la autoestima y calidad de vida la paciente.

2. QUIRÚRGICOS

Sí la paciente una vez valorada por el especialista no es candidata para terapia de piso pélvico mediante máquinas, debido a patologías de mayor complejidad, debemos realizar cirugías reconstructivas como vaginoplastia, corrección de labios menores y capuchón del clítoris y colocación de bandas para continencia urinaria, corrigiendo la armonía de la zona V y su funcionalidad.